viernes, 30 de mayo de 2014

Una nueva historia por contar


Empieza la historia de mi tercer contrato en Disneyland Paris, la historia de mi experiencia que os vengo contando desde aquellos inicios de los casting que pasé para llegar aquí.

Una nueva historia por contar se inició en el día de ayer cuando de nuevo me despedía de mi tierra en Huelva, hacia el destino que por tercera vez me acoge.
Salía un poco triste hacia el aeropuerto de Sevilla,  pues aunque sea la tercera vez, no me acostumbro a tener que marcharme, siempre todo es distinto, al menos así lo siento yo.

Me gusta la sensación que se tiene en el avión, sensación de sobrevolar el mundo, pasear por las nubes, es cierto pocas veces hay cosas imposibles.
Todo hay que decirlo, y llegar a Paris en avión resulta impresionante, es cuando te das cuenta que realmente ya estás lejos y aterrizando en tu nuevo destino, como todo en la vida, no hay marcha atrás, el pasado queda atrás con sus momentos, sus vivencias y ahora solamente queda vivir el presente que ya es mucho.
Todo pasó muy rápido, tres trenes para llegar a casa de mi gran amiga Sonia para pasar mi primera noche, Sonia es de estas amiga con mayúscula y mis primeros minutos los llenó de detalles hacia mi persona, siempre agradecida porque cuando se tiene sus circunstancias y su horario de trabajo valoras que tienes la suerte de poder dar gracias a Dios por tenerla ahí, pues bien es cierto que hoy en día la palabra amistad se dice tanto pero se aplica tan poco...
Hoy, ya me instalaba en mi nueva casa  situada en val d' Europe, ya la boisserie quedaba atrás el tiempo de aquella residencia que estuve en el año 2012, solamente queda Pleiades, es por eso que Disneyland ha tenido que coger también parte de las residencias que se encuentran aquí para poder alojarnos.
La verdad,  es que no tener que buscar alojamiento es ya una tranquilidad al venir a trabajar aquí .
Las residencias son siempre compartidas, ahí también entra la suerte de poder tener una compañera con la que te pueda llevar bien y tener una convivencia lo mejor posible, se crean grandes amistades y también pienso yo, ayuda a ser comprensivo, tolerante y te enseña a convivir con los demás siempre respetando.
Y así empieza una nueva vida, ya he conocido a mi nueva compañera de origen griego, es una de las partes positivas también de todo esto, que conoces a personas de distintos países con lo cual llega el intercambio de culturas.
También se aprovecha para poder aprender idioma, en su caso quiere aprender más el francés y en mi caso al saber ella mucho inglés lo quiero aprender, con lo cual  podemos practicar y corregir errores,  también es una forma de convivir, aprender de la otra persona.

4 meses que estaré aquí, contando nuevas historias. Mañana conoceré mi lugar de trabajo, es la incertidumbre que me queda.
Voy preparada evidentemente en que se trata de un trabajo y que entiendo que no todo va a ser perfecto, habrá días malos, días buenos, compañeros que no sean muy y otros bien, igualmente los jefes, pero voy a trabajar y tengo claro que cuando termine mi horario de trabajo mi vida es bien distinta.
Digo esto porque siempre una quiere que todo sea perfecto, mi anterior tienda para mí lo era en todos los sentidos, ahora pues en manos de mi destino está, pero mentalizada ya de muchas cosas, en eso sí que se nota mi tercer contrato.


Mi segunda noche.. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario